COMO PREVENIR DAÑOS DEL VIENTO y EL ESTRÉS MECÁNICO DEL CULTIVO
Efectos del estrés mecánico del cultivo debidos a la acción del viento
La acción del viento puede ser prevenida si tutoramos los cultivos de especies como cucurbitáceas y solanáceas generándole soporte a la planta y disminuyendo su estrés mecánico del cultivo por los efectos del viento.
¿Qué es el viento? El viento según el diccionario de la Real Academia Española lo define como: “Corriente de aire producida en la atmósfera por causas naturales”. Los cuales son vientos catastróficos, huracanes, ventarrones y tornados, su efecto en las plantas, se ha observado que el viento contribuye a disminuir la temperatura foliar, produciendo un descenso del déficit de presión de vapor en la capa límite de la hoja, afectando su acción fotosintética de la planta, el efecto del estrés mecánico en la planta propicia a que pierda fuerzas de sostén en la planta debido al movimiento de la planta o de partes de ella por vientos intensificados, también se refleja el efecto en los aspectos de la fisiología vegetal como la transpiración, la fotosíntesis, en la intervención en el transporte de polen y la propagación de las especies, por ello que se recomienda tomar medidas preventivas usando doble tutorado.
Debido al actual clima que nos enfrentamos día a día y los efectos del cambio climático que alteran al ecosistema debemos mantener seguridad en la siembra en beneficio del campo laboral agrícola. Como ya he mencionado el efecto del viento sobre las plantas está en relación con su intensidad y duración ya que los cultivos expuestos a fuertes vientos sufren de modo distinto el estrés mecánico del cultivo en la planta dependiendo su variabilidad y susceptibilidad de la especie.
Desarrollo de la planta
El inicio de la acción del viento en las plantas comienza ante todo en la semilla, que son depositadas en la superficie o a poca profundidad, siendo desplazadas por el terreno, causando retrasos en el crecimiento y desarrollo de la planta por los violentos vientos, que pueden o no provocar lesiones y crear estrés mecánico en las plantas, como rotura de ramas, flores o laceración de las hojas e incluso caídas del fruto en destiempo perjudicando la calidad esperada de producción. El viento no solo estresa a la planta de manera mecánica sino que también la estresa de manera hídrica, determinando la reducción de la reserva de agua disponible correspondiente según a la aridez del suelo, terreno, zona o región de elección para el cultivo.
Estrés mecánico
Como podemos apreciar en la imagen la acción perjudicial del viento en las hojas produce una incidencia directa sobre la superficie foliar de la planta, observándose un daño permanente en la hoja el cual se manifiesta mediante lesiones que toman la tonalidad marrón, depresiones debidas a rupturas de tejidos epidérmicos y desgarro de los mismos, las hojas mayormente juveniles serán mas susceptibles a este efecto y según la fuerza del viento este dañara el desarrollo natural de la planta, en un estudio microscópico por (Thompson, 1974, Mac Kerron, 1976; Wilson, 1980).
Pudieron observar que posterior al estrés mecánico de la planta por medio del viento, en una hoja vista desde el microscopio en el laboratorio de desarrollo vegetal, se dieron cuenta de las roturas en las células epidérmicas de las hojas con una superficie de apariencia alisada y con rupturas en las estructuras de las células epicuticulares, es una de las causas principales para desarrollar necrosis en la hoja seguida de desecamiento y muerte vegetal, que obstruye el medio de transporte de nutrientes al vegetal, y que en algunos casos la planta propicia a generar mayor gasto energético obteniendo de sus propiedades de almacenamiento y reserva un activo fotosintético que produzca pronta regeneración para su recuperación y supervivencia, pero si es desgaste mayor al que en ella pueda tomar de sus nutrientes puede llegar a causar muerte celular vegetal y morir, este daño es a veces irreversible y genera al agricultor las grandes perdidas de cultivo viéndose en la necesidad de resembrar.
Los efectos del viento
Otro efecto mayormente y no menos importante es el efecto importante en el fruto por las oleadas de vientos violentos que es perjudicial, que se observan sobre los frutos en los que frecuentemente el efecto del viento deprecia su valor comercial debido a la producción de heridas ocasionadas por el frotamiento contra ramas, troncos e incluso hojas maduras; las heridas producidas pueden ser restauradas mediante tejidos cicatriciales que al cabo de varios días desarrollan una capa protectora por la fricción y el machucamiento originado por vientos, aun de baja intensidad sobre los frutos tiernos es la causa de la generación de tejido suberoso sobre la epidermis del fruto, y aunado a este efecto, los daños en los frutos que lo hacen vulnerable por las heridas de fricción propiciando dispersión de patógenos oportunistas que a través del viento las espora se propagan fácilmente sin control alguno transportados a miles de kilómetros, causando la difusión de varias enfermedades de gran importancia comercial a una escala continental inoculándose en los frutos.
La malla espaldera como método contra el estrés mecánico causado por el viento
Por ello como un método preventivo contra el estrés mecánico del cultivo es apoyar a la planta sobre una malla espaldera en su desarrollo ante los efectos del medio ambiente y prevenir las futuras causas que pueden generar estas. El tutorado o sujeción de las plantas, como de las familias de las solanáceas y las cucurbitáceas chile, calabaza, melón, pepino, jitomate, berenjena entre otras, puede ser propicio el uso de la HORTOMALLA, si los cultivos pueden disponer de un soporte en el que apoyarse y crecer correctamente, evitando que los frutos como las hojas se estropeen por el contacto de sí mismos, barreras, troncos, postes que le causen aumento de estrés a la planta, con el tutorado se puede propiciar que los cultivos estén mayormente al alcance la luz y que el efecto de aire no sea de mayor impacto, ya que como soporte respalda la subsistencia de la planta como el éxito del futuro cultivo.
Tutorado
El tutorado no solo fomenta el apoyo de la planta sino que favorece la maduración homogénea de los frutos, facilitando las tareas de cuidados reduciendo el riesgo de problemas de plagas y enfermedades, así como proteger a nuestros cultivos de fuertes ráfagas de viento. Cabe evidenciar que el mismo tipo de efectos dañinos de estrés en plantas causados por el viento son causados también por la manipulación de los trabajadores durante las fases de poda y de tutoreo manuales, por esto HORTOMALLAS® sugiere que se dejen las plantas crecer libremente entre un sistema de doble malla para que el tutoreo sea pasivo y donde sea la misma planta a recargarse sola encima de los cuadros de la malla.
Bióloga Myriam Nazario
CITA BIBLIOGRAFICA
Baker, J. T. 2007. Cotton seedling injury and recovery from Wind Bloown Sand Abrasion: I. Duration of exposure. Agronomy Journal. 99, 556-561.
Bannan, M. W.; Bindra, M. 1970. The influence of wind on ring width and cell length in conofe
Kin, A. G.; Ledent, J. F. 2003. Efectos del viento sobre las plantas. En: Viento, suelo y plantas.
Golberg, A. D. & A.G. Kin, eds. Ediciones INTA. p. 45-72.
; Ledent, J. F. 1994. Effect of strong winds on young maize seedlings. In: Proceedings
Wilson, J. 1980. Macroscopic features of wind damage to leaves of Acer pseudoplatanus L. and its
relationship with season, leaf age and windspeed. Annals of Botany. 46, 303-311.
Llena el siguiente formulario para hacernos saber tus dudas o comentarios:
Efectos del estrés mecánico del cultivo debidos a la acción del viento
La acción del viento puede ser prevenida si tutoramos los cultivos de especies como cucurbitáceas y solanáceas generándole soporte a la planta y disminuyendo su estrés mecánico del cultivo por los efectos del viento.
¿Qué es el viento? El viento según el diccionario de la Real Academia Española lo define como: “Corriente de aire producida en la atmósfera por causas naturales”. Los cuales son vientos catastróficos, huracanes, ventarrones y tornados, su efecto en las plantas, se ha observado que el viento contribuye a disminuir la temperatura foliar, produciendo un descenso del déficit de presión de vapor en la capa límite de la hoja, afectando su acción fotosintética de la planta, el efecto del estrés mecánico en la planta propicia a que pierda fuerzas de sostén en la planta debido al movimiento de la planta o de partes de ella por vientos intensificados, también se refleja el efecto en los aspectos de la fisiología vegetal como la transpiración, la fotosíntesis, en la intervención en el transporte de polen y la propagación de las especies, por ello que se recomienda tomar medidas preventivas usando doble tutorado.
Debido al actual clima que nos enfrentamos día a día y los efectos del cambio climático que alteran al ecosistema debemos mantener seguridad en la siembra en beneficio del campo laboral agrícola. Como ya he mencionado el efecto del viento sobre las plantas está en relación con su intensidad y duración ya que los cultivos expuestos a fuertes vientos sufren de modo distinto el estrés mecánico del cultivo en la planta dependiendo su variabilidad y susceptibilidad de la especie.
Desarrollo de la planta
El inicio de la acción del viento en las plantas comienza ante todo en la semilla, que son depositadas en la superficie o a poca profundidad, siendo desplazadas por el terreno, causando retrasos en el crecimiento y desarrollo de la planta por los violentos vientos, que pueden o no provocar lesiones y crear estrés mecánico en las plantas, como rotura de ramas, flores o laceración de las hojas e incluso caídas del fruto en destiempo perjudicando la calidad esperada de producción. El viento no solo estresa a la planta de manera mecánica sino que también la estresa de manera hídrica, determinando la reducción de la reserva de agua disponible correspondiente según a la aridez del suelo, terreno, zona o región de elección para el cultivo.
Estrés mecánico
Como podemos apreciar en la imagen la acción perjudicial del viento en las hojas produce una incidencia directa sobre la superficie foliar de la planta, observándose un daño permanente en la hoja el cual se manifiesta mediante lesiones que toman la tonalidad marrón, depresiones debidas a rupturas de tejidos epidérmicos y desgarro de los mismos, las hojas mayormente juveniles serán mas susceptibles a este efecto y según la fuerza del viento este dañara el desarrollo natural de la planta, en un estudio microscópico por (Thompson, 1974, Mac Kerron, 1976; Wilson, 1980).
Pudieron observar que posterior al estrés mecánico de la planta por medio del viento, en una hoja vista desde el microscopio en el laboratorio de desarrollo vegetal, se dieron cuenta de las roturas en las células epidérmicas de las hojas con una superficie de apariencia alisada y con rupturas en las estructuras de las células epicuticulares, es una de las causas principales para desarrollar necrosis en la hoja seguida de desecamiento y muerte vegetal, que obstruye el medio de transporte de nutrientes al vegetal, y que en algunos casos la planta propicia a generar mayor gasto energético obteniendo de sus propiedades de almacenamiento y reserva un activo fotosintético que produzca pronta regeneración para su recuperación y supervivencia, pero si es desgaste mayor al que en ella pueda tomar de sus nutrientes puede llegar a causar muerte celular vegetal y morir, este daño es a veces irreversible y genera al agricultor las grandes perdidas de cultivo viéndose en la necesidad de resembrar.
Los efectos del viento
Otro efecto mayormente y no menos importante es el efecto importante en el fruto por las oleadas de vientos violentos que es perjudicial, que se observan sobre los frutos en los que frecuentemente el efecto del viento deprecia su valor comercial debido a la producción de heridas ocasionadas por el frotamiento contra ramas, troncos e incluso hojas maduras; las heridas producidas pueden ser restauradas mediante tejidos cicatriciales que al cabo de varios días desarrollan una capa protectora por la fricción y el machucamiento originado por vientos, aun de baja intensidad sobre los frutos tiernos es la causa de la generación de tejido suberoso sobre la epidermis del fruto, y aunado a este efecto, los daños en los frutos que lo hacen vulnerable por las heridas de fricción propiciando dispersión de patógenos oportunistas que a través del viento las espora se propagan fácilmente sin control alguno transportados a miles de kilómetros, causando la difusión de varias enfermedades de gran importancia comercial a una escala continental inoculándose en los frutos.
La malla espaldera como método contra el estrés mecánico causado por el viento
Por ello como un método preventivo contra el estrés mecánico del cultivo es apoyar a la planta sobre una malla espaldera en su desarrollo ante los efectos del medio ambiente y prevenir las futuras causas que pueden generar estas. El tutorado o sujeción de las plantas, como de las familias de las solanáceas y las cucurbitáceas chile, calabaza, melón, pepino, jitomate, berenjena entre otras, puede ser propicio el uso de la HORTOMALLA, si los cultivos pueden disponer de un soporte en el que apoyarse y crecer correctamente, evitando que los frutos como las hojas se estropeen por el contacto de sí mismos, barreras, troncos, postes que le causen aumento de estrés a la planta, con el tutorado se puede propiciar que los cultivos estén mayormente al alcance la luz y que el efecto de aire no sea de mayor impacto, ya que como soporte respalda la subsistencia de la planta como el éxito del futuro cultivo.
Tutorado
El tutorado no solo fomenta el apoyo de la planta sino que favorece la maduración homogénea de los frutos, facilitando las tareas de cuidados reduciendo el riesgo de problemas de plagas y enfermedades, así como proteger a nuestros cultivos de fuertes ráfagas de viento. Cabe evidenciar que el mismo tipo de efectos dañinos de estrés en plantas causados por el viento son causados también por la manipulación de los trabajadores durante las fases de poda y de tutoreo manuales, por esto HORTOMALLAS® sugiere que se dejen las plantas crecer libremente entre un sistema de doble malla para que el tutoreo sea pasivo y donde sea la misma planta a recargarse sola encima de los cuadros de la malla.
Bióloga Myriam Nazario
CITA BIBLIOGRAFICA
Baker, J. T. 2007. Cotton seedling injury and recovery from Wind Bloown Sand Abrasion: I. Duration of exposure. Agronomy Journal. 99, 556-561.
Bannan, M. W.; Bindra, M. 1970. The influence of wind on ring width and cell length in conofe
Kin, A. G.; Ledent, J. F. 2003. Efectos del viento sobre las plantas. En: Viento, suelo y plantas.
Golberg, A. D. & A.G. Kin, eds. Ediciones INTA. p. 45-72.
; Ledent, J. F. 1994. Effect of strong winds on young maize seedlings. In: Proceedings
Wilson, J. 1980. Macroscopic features of wind damage to leaves of Acer pseudoplatanus L. and its
relationship with season, leaf age and windspeed. Annals of Botany. 46, 303-311.
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